Abreme el pecho



No sé si tomé bien esa avenida
no diste indicaciones muy concretas
¿vais a dejaros ya tomar medidas?
le dijeron mis ganas a tus tetas

me salté a la torera tus consejos
y me diste un guantazo merecido
y aunque, sé, me viste venir de lejos
guardaste, si señor, la compostura

por que una dama a de guardar modales
que intentará saltarse un caballero
el juego del amar es un "quiensabe"
en el que atacan dos, nadie primero

el uno es un señor, la otra una dama
y siempre el marcador empate a cero
si el uno tira a gol la otra lo para

y alguna que otra vez hay una falta
y ella se enfada, y él la invita al cine
y al fondo de la sala desempatan.